jueves, 26 de junio de 2008

Oración del mes junio.


CASTIDAD-OBSESIÓN



Cuántos cristianos han reducido su religiosidad a una obsesión sexual. Señor, cómo hemos empobrecido tu Evangelio…
Quisiéramos gritar por las calles que ser cristianos es algo más que “no fornicar”, que es un simplismo pueril convertir al hombre en puro sexo.
No queremos seguir formando a nuestros hijos hipersensibles ante la castidad, y en cambio encallecidos para todo lo positivo: la justicia, el amor, la oración.
La impureza ya ocupa todo el horizonte moral, y no hay sitio para nada más. La moral puritana puede ser más nociva que la pornografía.
El pecado de la carne es el más epidérmico; es peor el orgullo o el egoísmo: pecados básicos que tragamos piadosamente. Enseñanos a dar su verdadero valor a las virtudes, a respetar la jerarquía. La castidad sólo vale porque es la cáscara del amor. El peor pecado solitario es el egoísmo.
Danos unos ojos de niño para ver con limpieza tu Creación; que recordemos que Tú lo hiciste todo “bueno” (Gen. 1,3.31).
No queremos oír hablar de “virtud angelical”, porque Tú no usabas circunloquios remilgados para hablar de le sexualidad. Sobre todo, que no olvidemos que sólo fuiste duro con el fariseísmo de los “perfectos”, los que juzgan y se escandalizan.
Oración de Luis Espinal